11 marzo 2008

En alguna ocasión veo muertos



Chateaba con mi amiga Mayte y discutíamos si las múltiples casualidades de su vida tienen alguna lógica, alguna base parapsicológica o son simplemente casualidades.

Mayte está a punto de aceptar la teoría de su compañera de cigarrito según la cual el mundo tiene las "almas contadas" y "equitativamente repartidas":
- A cada uno nos tocan x almas (el factor de reparto lo desconozco),
- a las que encuentras una y otra vez en función de las etapas de la vida.
Es como una permanente permutación de elementos. Eso sí, recordemos que siempre los mismos, detalle importante.

¿Significará esto que tenemos una imposibilidad primigenia por la que debemos intentar una y otra vez, encontrarle algún significado a nuestra relación con los distintos pedorros con los que nos topamos a lo largo de la vida?
¿O da igual que maltrates a tu marido? Al fin y al cabo no le queda más remedio que seguir soportándote :-D

Suponiendo toda esta teoría verdad, implicaría que tenemos alma.
Y si tenemos alma, el alma debe ser inmortal.
Y si es inmortal, ¿voy a tener que seguir con los mismos personajes una vez muerta, para bien o para mal?
¿Será este el verdadero infierno?¿O es eso precisamente, el cielo?
¿Es la vida entonces un "Día de la marmota"?

Me voy a ir mis orígenes gallegos. Allí todo es más simple.

De todos es conocido que por otra curiosa ley, en este caso de la genética (y de la niebla permanente que confunde un huevo), los gallegos "vemos muertos" en una alta proporción si se nos compara con otras culturas.
Me centro en mi aldea, Perbes, con una iglesia del siglo XII (San Xoan) con sus vecinos enterrados allí desde tal fecha. Mis vecinos llevan sin descansar 9 siglos, pues el cementerio a 20 metros de las vías del tren, es el camino a la playa, la bajada natural hacia las casas y además es la parte trasera del campo de futbol - "campo de la fiesta". En otras palabras: Escuchar las orquestas de las fiestas de verano a 5 metros toooodos los años, durante 900.

Si pienso la cantidad de almas que andarían paseando aún por allí, debo decir que considero la teoría completamente improbable: Los muertos igual que los vivos, te los encuentras por casualidad en los caminos mirando a sus nietos del otro lado de la ventana, vienen a decirte algo importante justo en el momento en el que se van, o como eran unos tocagüevos de vivos, pues lo siguen siendo de muertos; pero de lo que no tengo ninguna duda es que la mayoría siguen su camino, el que sea.
De no ser así, me habría pasado los veranos con la playa llena de fiambres en vez de madrileños!

Si las almas formasen parte de una política de "cuotas paritarias", habría legislación al respecto de tamaño overbooking!
Yo ya estoy llamando al 900-quítenme a mi muerto-321-ya. Si funciona, os aviso.

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